Más allá de cabernet sauvignon, malbec o merlot te esperan una cantidad de nombres de cepas que vale la pena conocer

Uva rara. Así, sin más. Es del piedemonte italiano y junto con la opulenta nebbiolo, a la que le debemos los barolo y barbaresco, es la permitida para los vinos de Ghemme. Parece que se acabó la imaginación al momento de encontrarle nombre a esta variedad.

Bastardo. Se cuenta que la trousseau, al viajar de Francia a Portugal, fue llamada así por las dificultades que se encontraban para su cultivo. Es una forma curiosa de subrayar estas complicaciones.

Cannonau. Al final lo curioso es que simplemente es la garnacha pero que adopta este nombre en la isla de Cerdeña. Si se toma en cuenta que ésta es la cuna del casu marzu, un queso con larvas vivas de mosca, que cambien el nombre de una uva es un mal menor.

Refosco dal Peduncolo Rosso. En el norte de Italia realmente quería diferenciar a esta variedad porque efectivamente el ramo del sarmiento que constituye la base del racimo es rojo. Admirada desde la época de Plinio El Viejo, todavía se le puede disfrutar en los vinos de Friuli.