¡Queremos que tengas éxito! Después de todo, el trabajo se hace más fácil cuando tenemos muchos emprendedores para reseñar. Por eso compartimos estas cosas que tampoco debes olvidar en tu emprendimiento

No uses tu estilo de vida como parámetro para tu negocio. La forma como gastas, en lo que estás dispuesto a pagar, incluso aquellos productos o servicios que crees que te resuelven un problema no pueden ser la única base de tu emprendimiento. Valga la obviedad, simplemente es tu vida, tu circunstancia, la clave es saber si hay suficiente gente que tiene tu perfil o, mejor aún, evaluar las necesidades de grupos grandes de potenciales clientes.

No descuides los costos. Capacítate, asesórate, revisa constantemente pero de un manejo adecuado de los costos depende la salud de tu negocio, así que no caigas en la trampa de hacer cálculos descuidados o que subestiman tus costos reales porque tarde o temprano lo vas a lamentar.

Piensa en alianzas más que en simples socios comerciales. Hacer una transacción con un proveedor o con un punto de venta es relativamente fácil cuando sólo se toman en cuenta los aspectos comerciales pero vale la pena hacer el esfuerzo adicional para convertir a esos socios en aliado. Escucha sus necesidades, trata de aportar valor de todas las maneras posible, sé consecuente y crea así alianzas duraderas. Incluso cuando capital flaquea y las ventas caen, los buenos aliados pueden ser la base que un negocio renazca.