Daniela Carrascal nos presenta la propuesta de Mingo, este nuevo restaurante en El Hatillo con un menú que reinterpreta platos clásicos de la gastronomía venezolana
“¿Sabe a Venezuela?” me preguntó el chef, Carlos Velarde, que amablemente salió a conocer mi opinión sobre su comida. “Sabe, y el Vuelve a la Vida me llevó a playa”, le contesté. Este plato, playero por excelencia, venía en un frasco de vidrio con tapa de rosca, puesto junto a dos platillos hondos, en los que el mesero vertió los mariscos y su jugo, al momento de servir; todo acompañado por tostones muy finos. El emplatado reflejaba la propuesta de sabor tradicional acoplado con una presentación discretamente moderna, patrón que se repetía en el resto del menú que probé.
Mingo, que apenas tiene dos meses, propone una carta sin pretensiones en la que interpreta platos venezolanos que buscan revalorizar los ingredientes nacionales. No sólo ocurre a través de su comida, sino en varios elementos, empezando por el nombre que hace referencia al juego de bolas criollas y en los individuales donde se puede leer el significado de algunos venezolanismos; con el fin de ser un espacio para rescatar la venezolanidad, como comenta Gustavo Rivas, uno de sus dueños.
Un paseo por la carta da luces de elementos que son comunes en sus preparaciones, como quesos criollos, coco y ají. Igualmente, muestra clásicos de la gastronomía nacional y sus vertientes, como el Asado Negro y, respectivamente, el Risotto de la Negra, preparado con la salsa del asado, queso trenza y salsa de ají; plato que se enlista entre los “Musiús Reencauchados” del menú. El cordero también es uno de los productos que destacan. Se encuentra en talkarí y en el ragú que acompaña los ñoquis de plátano. El pisillo, otro protagonista, se degusta como relleno en las empanaditas de masa de caraota y en las arepas; también como parte del plato El Viaje.
El “Carrito de los Postres”, como se lee en el menú, ofrece una sorpresa para quienes gustan de las recetas de antaño y es la torta bejarana, aunque hay que tener suerte para encontrarla. Sin embargo, a Juan Sabroso siempre se le halla haciéndole honor a su nombre.
Detrás de este menú, cuyos platos están construidos bajo el concepto de armonía por contraste donde lo salado, dulce y picante comparten un mismo espacio, está Carlos. Este joven cocinero empírico tiene 15 años tras los fuegos. Es de Guárico pero vivió en Mérida y trabajó en Albahaca Grill, San Cristóbal, su primera experiencia con la cocina. Hoy, bajo la asesoría de Gilberto Martínez, conocido chef de Il Grillo, desarrolló el menú de Mingo, pensado, según Carlos, para que todos los platos sean protagonistas.
Mingo
Plaza Bolívar de El Hatillo.
Miércoles a viernes a partir de las 12 del mediodía.
Sábados y domingos desde las 9 am.
Teléfono: 0212-9359806
TW – IG @mingorestaurant