
Repasamos algunos de los placeres del buen comer y el buen beber que estaremos disfrutando este año que recién comienza
Agua: variaciones sobre un mismo tema. Mientras hay un mayor convencimiento de la importancia de la hidratación y factores como el cambio climático llevan a temperaturas inusualmente altas, el agua va a tomar todavía más protagonismo con aguas intervenidas, catas de agua y dispositivos como los termos con sensores.
Menú degustación. Ir a un restaurante en Venezuela y ordenar a la carta puede ser un deporte de alto riesgo por un tema de precios por lo que proyectamos que una tendencia que comenzamos a ver en 2023 incluso en restaurantes de carne, de menús degustación o combos de precio fijo de va a mantener y ampliar.
Mayor valoración del café venezolano. Lo que venía mostrándose como una excentricidad, el conocimiento sobre el café, cada vez es más extendido y hay productores y tostadores que se entusiasman con productos más innovadores y clientes que pagan el alto precio generalmente asociado a esto.
Debate sobre la comida y su origen. Más allá de las convicciones, estamos a las puertas de discusiones a gran escala sobre la comida. Cómo deben criarse los animales que se van a comer, si debe comerse o no proteína animal, cuáles son las consecuencias de la forma que tenemos hoy de comer son todas preguntas que a través de eventos, documentales e incluso locales de comida y productores vamos a ver repetirse.