Hasta finales del mes de agosto el restaurante dirigido por Jean Paul Coupal ofrece variaciones de esta especialidad italiana y aquí te contamos qué hace especial esta interpretación de un clásico
No. 1 La búsqueda del ñoqui perfecto. Para Difrines Cafay, jefe de cocina del restaurante, la tarea ha sido clara: tratar de hacer la mejor versión de lo que esencialmente debe ser un buen ñoqui. Así que para cada una de las versión que se sirven, Cafay busca que sean ligeros, de textura suave y que eviten ese carácter chicloso que le confieren una textura desagradable al comerlos.
No. 2 Variaciones propias. El menú de este festival comienza con los ñoquis clásicos de papa pero también incluye de remolacha, de auyama, de plátano, rellenos de chorizo carupanero y de cilantro para completar una oferta diversa y variada.
No. 3 Despliegue de productos venezolanos. Salsa cuatro quesos que provienen de los estados Falcón, Táchira, Yaracuy y Apure; una bisque de camacutos, aprovechando la temporada, para acompañar una salsa marinera y huevas de lisa de Cumaná que se rallan sobre el plato al llegar a la mesa con lo que se obtiene un sabor y una textura particular son parte de los productos que muestran el compromiso de DOC de ser una vitrina de sabores criollos de diferentes partes del territorio que muchas veces desconocemos. (imagen Alejandro Olivares)