Si te gusta la idea de una cena de pavo como la del Día de Acción de Gracias o Thanksgiving Day no te pierdas estas sencillas recomendaciones apra que triunfes con tu pavo

No. 1 Grasa es el secreto. Para lograr un asado muy jugoso hay un truco muy sencillo, solo necesitamos manteca de cerdo o de pato y un paño de algodón o lino limpio. Lo que haremos será derretir la manteca hasta que quede líquida, entonces empaparemos bien el paño en ella y cubriremos durante la cocción el pavo con el paño. Esta sencilla técnica conseguirá que se mantenga en el interior del ave sus jugos, consiguiendo así una carne mucho más sabrosa.

No. 2 Lo bueno se hace esperar. A la hora de hornear la proporción peso y tiempo sería de aproximadamente de una hora de horno por cada kilogramo de carne. La carne de pavo siempre que la hagamos a una temperatura de horno baja será más tierna y jugosa cuanto más tiempo tenga de cocción.

No. 3 Toque final. Cuando se haya acabado el tiempo de horneado, es importante tapar con papel de aluminio durante quince minutos el pavo. Esto hará que se queden retenidos los jugos que suelta la carne en ese rato de enfriamiento entre el horno y la mesa. (vía Directo al Paladar)