Si quieres que tus hijos no sólo lleven sabores deliciosos sino también saludables y nutritivos, revisa estas opciones para el nuevo año escolar
No. 1 Yogurt. El yogurt es una fuente de proteínas, calcio y vitaminas, al combinarlo con frutas naturales le aportas a la merienda mayor cantidad de nutrientes. Ente otros beneficios, este tipo de combinaciones mejora el sistema digestivo. Adicionalmente acostumbra el paladar del niño a los matices ácidos que son propios de algunos alimentos.
No. 2. Pan de sándwich. Preferiblemente integral para tener el aporte adicional de fibra. además, puedes agregarle un toque de creatividad a este plato, usando cortadores de galleta para darle formas divertidas como corazones o estrellas. Además, es versátil y fácil de transportar.
No. 3 Queso. Preferiblemente blanco que tiene menos contenido graso que el amarillo y aporta calcio y otros nutrientes.
No. 4 Cereales. Puede ser la avena que podría incluirse líquida o en preparaciones como panquecas en las que la avena sustituye a la harina de trigo es otra forma de añadir fibra a la dieta del niño. Pero también otros cereales como los que componen la granola que pueden acompañarse de leche preferiblemente descremada. En el caso del maíz, ni que decirlo, con arepas y cachapas hay una opción que no sólo es saludable sino que fomenta la identidad gastronómica del niño con su país.
No. 5 Miel. Aparte de ser un endulzante natural y más saludable que el azúcar blanca, le da un toque diferente a otros componentes como el yogur y las panquecas que mencionamos anteriormente.
No. 6 Frutas y vegetales. Frescas, en jugo o en batidos son un una manera saludable, rica y diferente de complacer un antojo dulce y mantenerse hidratados. Además, los palitos de zanahoria suelen ser bien recibidos por su textura crujiente, así como la incorporación en las arepas de la misma zanahoria, remolacha o espinaca que aparte de volverlas nutritivas le dan colores divertidos. (con información de Locatel)