De las leyendas de su origen a su perfume de orquídeas este té es un placer exquisito
No. 1 Origen. Este famoso té se cultiva en China, en Qimen, provincia de Anhui, el Este del país. Variadas historias acompañan el nacimiento de esté té, y aunque la producción de té verde en Qimen tiene una larga tradición que se remonta a la dinastía Tang, el cultivo y producción de té negro comienza a fines del siglo XIX, probablemente inspirándose en el famoso té negro de Fujian, Lapsang Souchong, cuyo prestigio y exportaciones crecían por esa época.
No. 2 Características. El té Keemun adquirió su propio carácter y merecida fama debido a su excelente calidad e intenso aroma. La combinación del suelo con buen drenaje y el clima cálido y húmedo de la zona permitieron una buena adaptación de las hojas de té a la fermentación. El aroma afrutado, con notas de pino y flores secas crean su sabor distintivo y equilibrado. Suave, fresco y con cuerpo se suele utilizar en versiones de calidad de famosos blends como el English Breakfast.
No. 3 Fama. Conocido por distintos nombres que dan cuenta de su condición como “el borgoña de los tés” o “reina de las fragancias”, por su aroma a veces a orquídeas se lo denomina también “dulce té de China”, donde suele beberse solo sin leche ni azúcar. (vía Infusionistas)